Cofre con material terapéutico que facilita una nueva forma de reconocer y expresar las emociones de los niños entre sus iguales, familia, profesores, cuidadores, etc. Se trata de un soporte muy novedoso para trabajar la inteligencia emocional para los profesionales y docentes. Su ánimo es ser diferente, ayudando a identificar a expresar las emociones a través del juego y de una forma visual.
¿QUÉ CONTIENE EL COFRE OKEMOS?
El cofre Okemos contiene un collar con tres emociones básicas (alegría, tristeza y enfado) más 16 placas Okemos emociones, todas ellas en estuches individuales al que se adjunta un folleto explicativo que enseña a gestionar dicha emoción y, además, un taller gratuito webinar “El mundo de las emociones” donde se trabajan las emociones básicas y se realizan diferentes dinámicas junto a los Okemos.
¿CÓMO SE UTILIZA LA HERRAMIENTA OKEMOS?
Esta herramienta se compone de un collar con tres emociones básicas; con el sencillo gesto de girar la placa emoción Okemos, el menor podrá evidenciar la emoción que siente y ha reconocido previamente. A su vez lo completa 16 emociones más que pueden ser engarzadas en otro soporte (mochilas, estuches…) y, sobre todo, en el collar para ir trabajando la emoción elegida.
¿QUÉ CONSEGUIMOS CON SU USO?
Fomentar la adquisición de habilidades de reconocimiento y expresión de emociones, aspectos básicos para el desarrollo personal.
- Facilitar la expresión de las emociones de una manera lúdica, sencilla e intuitiva.
- Mejorar la integración social de personas con diversidad funcional.
- Promover el reconocimiento de emociones en los otros, mejorando la empatía.
- Abrir una vía de comunicación sencilla entre niño con sus terapeutas, padres o cuidadores, profesores e iguales.
- Facilitar la extrapolación de los aprendizajes a diferentes entornos del menor.
- Perseguir una filosofía claramente motivadora ya que posibilita al profesional ofrecer un refuerzo a la terapia.
¿A QUIÉN VA DIRIGIDO?
Al ser una herramienta sencilla y fácil de usar puede ser utilizado desde edades muy tempranas. Su forma de llevarlo, al ser un collar, permite al menor poder extrapolarlo llevándolo al ámbito familiar y en su entorno.
Es un artículo con doble feedback, ya que hace partícipes al menor que lo lleva y a las familias y profesionales del ámbito clínico y educativo.
Utilizándolo, principalmente, en la introducción a la educación emocional, y también muy útil adaptándolo fácilmente a las necesidades y dificultades: Daño Cerebral Adquirido (DCA), Autismo (TEA), síndrome de Down, Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), Trastorno Específico del Lenguaje (TEL), dislexia, discapacidad intelectual.
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